Ir al contenido principal

"Las once magníficas de Robert Capa"


6 de Junio de 1944. Operación Overlord. Normandía, Francia.

Ya han pasado 75 años desde que se puso en marcha una de las misiones militares más famosas de la historia. La operación Anfibia casi imposible de lograr estaba a punto de llegar a su fase de ejecución.
Postergada por 24 horas debido al mal clima disparaba a grado exponencial la ansiedad.
La invasión preparada por aire y mar comenzó en la madrugada del 6 de Junio. Fuego de artillería naval y más de 1200 aeronaves transportaron a más de 24000 paracaidistas que tenían misiones especificas tras líneas enemigas. Mientras tanto en las playas Utah, Omaha, Gold, Juno y Sword (nombres en código puestos por los aliados) 132.000 soldados cruzaban en canal de la mancha directo a las arenas Normandas.
Cientos de lanchas anfibias transitaban el mar agitado y en una de esas iba el conocidísimo fotógrafo de guerra Robert Capa.
Su verdadero nombre era  Endre Friedmann y nació Budapest 22 de Octubre de 1913. Utilizaba el seudónimo Robert Capa y con él pasó a la historia. Él iba junto al 16to regimiento de la 1ra división de infantería.
¿Su armamento? Dos cámaras réflex Contax II de 35 mm con lentes 50mm.
Decidió ir en las primeras olas de ataque, en la playa de Omaha que fue el más duro de los desembarcos y ya les voy a comentar por qué.
Robert tenía un dicho "si tus fotos no son lo suficientemente buenas, es porque no te has acercado demasiado" y vaya si lo hizo.
Los alemanes sabían de la probable invasión de los ejércitos aliados y pusieron en marcha un sistema defensivo a lo largo de la costa norte de Francia y también en Escandinavia.
Se emplearon 11 millones de toneladas de hormigón y 1 millón de toneladas de acero.
Todavía sus restos yacen en las costas europeas.
El Mariscal de campo Erwin Rommel, conocido como el zorro del desierto,  quien lideró la guerra en el norte de áfrica demostrando su destreza con sus tanques fue asignado a la defensa de la costa francesa antes de la invasión aliada.
Allí se alistaron defensas y trasladaron varias guarniciones de soldados para reforzar la zona. Los alemanes eran superiores en armamento.
Contaban con la que fue llamada la "sierra circular de Hitler". Se trataba de la ametralladora MG-42 que se montaba en un trípode, se apostaba en lo que se denominaba "nido" y era mortífera. Su calibre era de 7.62mm y tenía una cadencia de tiro de unos 1200 disparos por minuto, tremendo.
A eso se enfrentaban los soldados cuando se abrían las puertas de las lanchas anfibias, entre ellos iba Robert Capa.
 La lancha toca tierra a unos 100 metros de la playa, se abre la puerta y los soldados saltan al agua. Robert permanece unos instantes más sobre la lancha y captura esta imagen.



El contramaestre de la lancha lo lanza de una patada al agua, probablemente pensó que el miedo lo había paralizado.
El fotógrafo cuenta.

"El agua estaba fría, y la playa se encontraba todavía a más de cien metros. Las balas agujereaban el agua que me rodeaba y me dirigí al obstáculo de acero más cercano."

Robert continuó entre ráfagas de plomo, entre cadáveres y hierros retorcidos mantenerse con vida y seguir registrando con su cámara, pero la situación se tornó sumamente delicada y el mismo lo manifiesta.
" y la situación empeoró. La cámara vacía temblaba entre mis manos. Era un nuevo tipo de miedo que sacudía mi cuerpo de pies a cabeza y me desencajaba la cara." No podemos imaginar lo que debió haber sido ese espantoso escenario, Robert complementa.
"Los hombres a mi alrededor yacían inmóviles. Únicamente los muertos tirados en la línea de flotación rodaban con las olas..."
   Robert Capa/Magnum

Luego una lancha con médicos a bordo apareció, continuó argumentando.
"Ni lo pensé ni tomé la decisión. Simplemente me levanté y corrí hacia el bote. Me metí en el mar entre dos cuerpos y el agua llegó hasta mi cuello. La ola de la marea marea golpeó mi cuerpo y cada ola azotaba mi cara bajo el casco. Sostuve mi cámara por encima de mi cabeza, y de repente supe que estaba huyendo. Intenté girarme pero no podía y me dije a mí mismo: 'Solo voy a secarme las manos en ese bote’.


    Robert Capa/Magnum

Robert tuvo la posibilidad de volver a la playa y seguir fotografiando, colocó nuevos rollos a sus cámaras... pero no volvió.
La guerra es cruda y desgarradora, Robert fue muy valiente al emprender este viaje y exponer así su vida.
El resultado quizá no fue el esperado, sólo 11 fotografías se salvaron (en realidad 10) de lo que supuestamente fue un error en el revelado. Robert sacó más de 100 instantáneas de ese momento clave de la segunda guerra mundial y esas fotos pasaron a la historia como "las 11 magníficas".
Su entrega y valor lo ponen en la cima de los reporteros de guerra.
Estas fotos ayudaron al director de cine Steven Spielberg a inspirarse para la película "Rescatando al Soldado Ryan".
Robert vivió una vida al límite y llena de adrenalina. falleció a los 40 años de edad en Indochina, cubriendo otro conflicto bélico. Fue el 25 de Mayo de 1954. Pisó una mina que le voló una pierna y dañó gravemente su pecho, murió camino al hospital.

Produjo aproximadamente 70.000 negativos en 22 años de carrera.


Hasta la próxima.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Saladero de los Piratas Holandeses

Así como lo leen, El Saladero de los Piratas Holandeses. Según cuenta la leyenda y los lugareños más veteranos allí supo funcionar en los 1700 el centro de operaciones de estos singulares personajes que contrabandeaban cueros procesados para Europa.  Hoy en día es increíble que aún estén en pie sus estructuras, es un grupo de edificios con un corral de piedra circular perfecto y un ombú majestuoso que decora de manera tétrica en invierno cuando desnuda sus ramas y de manera imponente en la primavera cuando está florecido. Algunos dicen que allí no existió tal saladero, por otra parte muchos afirman que si existió.  Lo cierto es que cuando se recorren sus edificaciones y comienza a pasar el tiempo se torna en algo especial. Probablemente de estas construcciones abunden en la profundidad de los campos. El saladero es de una belleza cautivante, fui en dos oportunidades, una al mediodía y la otra al caer el sol, sin dudas dos experiencias maravillosas. Espero qu...

La Mejor fotografía de deportes del siglo XX

25 de mayo de 1965 en St Dominick, Lewinston, Maine. Muhammad Ali se enfrenta por el título mundial de los pesos pesados contra el defensor Sonny Liston. En ese momento la categoría de los pesos pesados tenía un atractivo muy especial, contaba con una camada de excelentes boxeadores más allá de la presencia de Ali que con una magnética personalidad y un estilo de boxeo muy eficaz logró a la postre convertirse en una leyenda del deporte. Este combate fue muy particular porque del mismo salió la mejor fotografía de deportes del siglo XX. La pelea para desazón de los fanáticos duró poco, tan solo dos minutos y ocho segundos, el famoso "Phantom Punch" mandó a Liston a la lona. En ese momento al fotógrafo Neil Leifer se le presentó la chance de su vida. con tan solo veintidós años, fanático de los deportes desde su adolescencia y sobre todo por el boxeo se vio en un escenario de condiciones ideal para lograr algo "histórico". Fue de los pocos fotógrafos que te...

La Mano de Dios 22 de Junio de 1986

22 de junio de 1986, se juegan los cuartos de final del mundial de México y se enfrentan Argentina e Inglaterra. Un partido bañado por trasfondos políticos dado que la Guerra de las Malvinas se había librado apenas cuatro años antes y con un resultado muy adverso para los argentinos. Este aliciente hacía que no fuera un partido más y eso se vio desde el minuto uno del encuentro. México no afrontaba su mejor realidad, ¿el motivo? El año anterior al mundial, un terremoto de magnitud 8.1 en la escala Richter golpeó sobre todo al distrito federal mexicano con una destrucción muy significativa de la ciudad. A pesar de esto, el imponente estadio Azteca albergó a más de 110.000 almas para presenciar este choque de potencias. El partido comenzó a las 12:00 del mediodía. Hacía mucho calor. La temperatura rondaba los 30 grados y la altura de 2250 metros sobre el nivel del mar eran condiciones durísimas de afrontar. Eduardo Longoni —fotógrafo argentino, por aquel entonces de 26 añ...